domingo, 1 de mayo de 2011

Última Parte del Bloque II: Análisis de libros infantiles. LO CORREGIDO ES LO SUBRAYADO Y PENDIENTE DE REVISIÓN.

Durante varias clases nos dedicamos aprender cómo se hace un análisis de cualquier libro infantil. Es muy importante como futuros maestros/as que vamos a ser, seleccionar correctamente los libros que ofreceremos a nuestros alumnos y de los que dispondrán en cualquier momento en la pequeña biblioteca de nuestra aula. Y a continuación explicaré las características en las que nos deberíamos de fijar en todo momento:




1. Receptor: Lo primero y fundamental que tendríamos que hacer es leerlo y decidir para que edad estaría indicado. Como norma general en los álbumes de imágenes no ponen la edad a la que va dirigido, sin embargo en otros libros sí que lo ponen, pero son criterios editoriales que se difuminan cuando conocemos a nuestros niños. Los datos no son importantes, depende de tus alumnos, así que lo más preferible es que decidiéramos nosotros la edad a la que va destinado ese libro, por ese motivo tendremos que tirar de nuestro conocimiento de los niños.


2. Emisor: Es el personaje que aparece en el libro y que le transmite la información al niño y suele ser el personaje con el que se puede identificar, en el caso de que no haya, sería el que lo narra en el libro. Por ejemplo en el libro infantil: Amelia quiere un perro” Tim Bowley & André Neves, el emisor sería Amelia porque los niños se pueden identificar perfectamente con ella, les transmite cosas, ya que Amelia vive en una casa como los niños. Encontramos el denominado emisor neutro, que no se presenta en el libro, donde un claro ejemplo de este tipo de emisor sería el de “Un bicho raro” Mon Daporta y Óscar Millán, donde el emisor sería el que cuenta la historia del ratón, el que lo ha escrito, el que lo cuenta dentro del libro. El emisor en cualquier libro infantil puede ser un niño, un objeto personalizado, sencillo y cercano que permita al niño identificarse con él, como un búho que vaya a la escuela igual que cualquier niño. Cuando no se puedan identificar será un libro malo.







3. Tema: Debe poder entenderlo el niño, que parte de los intereses de un niño como por ejemplo querer un perro. Tener un animal de compañía, es un interés que le surge a los niños.


4. Estructura: Podemos encontrar 2 tipos diferentes de estructuras en un libro infantil que se pueden combinar y sería la forma más sencilla y la mejor:

Ø La estructura básica de la narración: Planteamiento, nudo y desenlace.

Ø Estructura acumulativa: Hay una sola acción, pero se acumulan personajes al realizar esa acción o sus variantes. Ejemplo: Amelia siempre hace lo mismo, porque va y le pide a su padre un perro, se va y vuelve diciendo que ahora quiere un elefante,… o como en: “A que sabe la Luna” ó “El gallo quirico”.








5. Espacio y tiempo: Deben ser neutros (había una vez en un lejano país no nos determina nada) o espacios concretos conocidos por el niño.

6. Ilustraciones: No deben ser estereotipadas para que los niños tengan ese nivel artístico, para que desarrollen su creatividad. Para que vean la realidad con otros ojos e imaginar. Las ilustraciones deben secuenciar la historia y una vez contado el cuento debe poder seguir el niño el sólo la historia (secuenciación de imágenes).

7. Lenguaje: Los niños protagonistas tienen que hablar como los niños, con la lógica de un niño, ejemplo: Amelia: “porque no una ballena para que pueda subir en su chorro de agua”. Ajustarse a como hablan los niños de esa edad, tienen que ser frases cortas con pocas subordinadas y algunas coordinadas. Un vocabulario ajustado a la edad del niño. No es malo que el niño no conozca una palabra porque así se aumenta su aprendizaje, pero lo que sí es malo es que te estén preguntando cada dos por tres por el significado de una palabra.


8. Valores y contravalores (aspectos positivos y negativos que se manejan en la historia): Ejemplo: Amelia es persistente, creativa,…



Para que sea un buen libro hay que acabar siempre en positivo, aunque se empiece por negativo igual debería de acabar en positivo. Nunca un libro de infantil debería terminar en negativo.


“Adivina Cuánto Te quiero”



1.    Pequeña reseña:


Ø  Título: Adivina Cuánto Te quiero.
Ø  Autor: Sam Mc Bratney.
Ø  Ilustrador: Anita Jeram.
Ø  Editorial: Kókinos.


2.    Receptor: Este libro iría dirigido a niños de edades comprendidas entre los 2-7 años. El receptor es el niño que lee, ve el libro o al que se lo cuentan.

3.    Emisor: Es la liebre pequeña de color avellana. Refleja la psicología infantil. Se comporta como un niño, habla como un niño, mide como un niño. En todo el juego, el niño pretende superar al adulto. Al final el adulto deja ganar al niño. La liebre grande está muy bien trazada como cuida al pequeño. El niño se identifica con la liebre pequeña e incluso puede identificar a la liebre grande con su madre, padre,… El adulto de referencia no hace falta que sea la madre, es lo que refleja claramente esta autora. El emisor corresponde con un niño de esa edad.

4.    Tema: El cariño (Adivina cuánto te quiero) y el del juego los dos claros ejemplos de tema en este libro infantil porque interesan al niño de forma natural, es un tema típico de esta edad. Con este libro se pueden trabajar las medidas, el irse a dormir,…aunque son temas secundarios, ya que no es la intención principal del libro.


5.    Estructura: Es una mezcla entre las dos estructuras explicadas anteriormente, tiene tanto parte de básica como de acumulativa. Libro formado por un planteamiento, un nudo acumulativo (demostrar cariño con cuantificadores). Este tipo de estructura le interesa mucho a los niños.


6.    Espacio y tiempo: El tiempo es indefinido porque no hay ningún referente histórico. Se desarrolla en un bosque, en un campo, una pradera. Sitio normal para las liebres, sitio neutro. No van vestidos, hay referencias que acercan este espacio al niño. Por ejemplo: donde te besa tu madre o tu padre y te dan el beso de buenas noches es en tu casa igual que ocurre en el libro cuando la liebre grande, hace lo mismo con la liebre pequeña. El niño se puede identificar, son aceptables y reconocibles.

7.    Ilustraciones: No son estereotipadas, son muy expresivas. La intencionalidad es artística y puede seguir perfectamente la historia, es una secuencia.


8.    Lenguaje: Las frases son cortas con un vocabulario simple y cercano al niño como por ejemplo: ala que alto,… El lenguaje utilizado responde a un lenguaje infantil. Además se utiliza un lenguaje poético, por ejemplo: La liebre grande de color avellana, enorme oscuridad de la noche. No es un lenguaje complejo, está bien cuidado con un alto grado de función poética.

9.    Valores y contravalores: Los valores positivos serían= activa, cariñosa, competitiva admirando al contrario, no se enfada porque el otro le gane, juguetona, admiración (Ojalá yo tuviera…), respeto,…Empieza en el lado de los valores positivos y se sigue manteniendo en ellos.

Como conclusión es un libro perfecto en todos los sentidos para niños de edades comprendidas entre los 2 y 7 años. Me ha encantado descubrir un libro tan instructivo y a la vez divertido, con el que los niños se pueden identificar claramente y que seleccionaré sin ninguna duda entre otros muchos, como libro que ofreceré a mis alumnos en mi futuro como maestra.

2 comentarios:

  1. Hola Irune. No quería dar a entender que para mí este libro es regular, con la palabra adecuado, porque para nada tengo esa opinión. Lo debí de entender mal.

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  2. Ahora está perfecto.

    Ya sé lo que querías decir, mujer... pero quiero que entiendas que "adecuado" es una palabra que sólo quiere decir eso, adecuado, válido, aceptable... Lo de concluir si es "adecuado" o no, tiene sus niveles: hay libros no adecuados, adecuados, interesantes y perfectos, como este :)

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